La Penultima Pamplina

Anoche fue Halloween. Anoche creo que era no se que mierda de la noche de brujas. Anoche creo incluso que fuimos a una fiesta en el Zinam...., ejem, digo el en 69 pétalos. Nada. Todo esto fue eclipsado. Y es que ayer una mujer dejó de ser niña. Y no hablo que se hiciera las ingles brasileñas, ayer una mujer a la que por seguridad llamaremos "U.P.O." (Unánime Papa Ordinaria) (Sí, señores la papa que cogió fue tanto ordinaria como unánime) coqueteó con los [-OH] como nunca lo había hecho antes. Y es que lo que tuvimos la suerte o la desgracia de ver anoche fue una mezcla de desenfreno adolescente y picante disposición al sexo que, aderezado con reggaeton nos hizo replantearnos con quién compartimos nuestros momentos de ocio.
Bailes deshinibidos, gestos de baja alcurnia... todo un despliegue de grititos, movimientos pélvicos y desaires a cualquier código ético que hicieron el deleite a mi hiperactivo cerebro. Brutal.
Bueno no quiero alarmar a nadie. Al final las aguas volvieron a su cauce, la princesa tajada volvió a su palacio en su carruaje a la hora acordada (más o menos) no sin dejar en la memoria del que os habla una imborrable mancha con olor a legendario, una impronta que a todos nos hará pensar en ella de forma diferente, ni mejor ni peor...
Un saludo a "U.P.O.", el alto mando (ale y yo) supone que SÓLO la susodicha sabe de quién hablamos (jejejeje), y así quiero que se quede.
Un saludo a todos los lectores habituales de esto, en especial a nuestro seguidor más fiel, Malmeto.
Un besi. Gareth.