"Las palabras elegantes no son sinceras; las palabras sinceras no son elegantes" Lao-tsé (570 aC-490 aC) Filósofo chino

¡Aloha! Escribo estas líneas relamiendo mi libertad, derecho constitucional rehén durante la época de exámenes. Como veis el blog ha tomado nuevo impulso y nuevos bríos, algo que, tomando prestada la consabida expresión donjuancarlesca, nos llena de orgullo y satisfacción. Como dijo Don Manué: "Estábamos en la UVI, nadie daba un duro por nosotros..."

Hace algunas semanas el PSOE prometió una devolución fiscal a los que declaran el IRPF de 400 euros. Eso viene a significar que todos ellos dejarán de pagar 400 pavos, da igual que se dediquen a la chapa y pintura 6 días a la semana que a las relaciones públicas de una discoteca los findes; el mismo dinero para la hija de Emilio Botín que para el que le pone la lechuga al McPollo. Y ustedes dirán, si algunos pagamos más impuestos que otros porque tenemos más pasta, por todo aquello de la repartir la riqueza, ¿por qué nos dan lo mismo a todo el mundo, ahí, a lo bruto? Es una manera de reactivar la economía dejando más dinero en el bolsillo de la gente, pero desde luego, además de ser muy populista, es como matar moscas a cañonazos. Más gente rica, más gente pobre.

Al otro lado del río, el Partido Popular ha prometido plantar 500 millones de árboles durante todo la lesgislatura, en caso de que ganen las elecciones. Amén de unas sencillas operaciones matemáticas, plantar ese número de árboles supone 237 árboles por minuto durante todos los minutos de todas las horas de todos los días de todas las semanas de todos los meses de todos los años de la lesgislatura 2008-2012. No sé cómo cobrarán las horas extras los jardineros, pero desde luego la FP de Botánica se va a petar. Pero no importa: Mariano Rajoy y su tenaz equipo de gobierno contratarán una ingente legión de sudamericanos para que planten arbolitos de sol a sol. Eso sí, en virtud del nuevo Contrato de Integración para inmigrantes (nada de alemanes de Mallorca ni canadienses de la Chevrolet, tiene que ser de estos morenitos que salen el Antena 3 saltando alambradas y robando lechugas), adoptarán las costumbres típicas del trabajador español, a saber: una Cruzcampo cada horita, un Ducados cada media, mucho gorronear en la hora de la comida y siesta después del papeo. Faltaría más: si los integramos, los integramos, con todas las consecuencias.

Todo esto sin comentar las propuestas rollo subasta, en plan yo hoy digo que crearé 2 millones de puestos de trabajo y tú mañana subes la cifra a 2 millones 200 mil (no es cachondeo, es verídico). Aunque parezca mentira todavía estamos en pre-campaña, lo que quiere decir que cuando entremos en campaña se sospecha que los candidatos ofrecerán la cartilla de sus respectivas madres. En fin, el circo de la política. Y los que nos queda.